Primera experiencia:
Materiales: Un globo y un pulover.
Primero hay que cargar con energía un globo frotandolo contra el pulover. Luego se pone en contacto con el pelo y al ser cargados el globo y el pelo, con energías opuestas, éstos se atraen. Veremos fácilmente como el cabello se eriza.
Segunda Experiencia:
Materiales: Una lata y un globo.
Ponemos la lata encima de una mesa. El globo lo frotamos con el pelo. Al acercar el globo a la lata, sin tocarla, observaremos que ésta empieza a moverse hacia el globo y si lo retiramos, la lata lo seguirá.
Tercera Experiencia:
Materiales: Una canilla con agua, un peine, medias de lycra.
Primero hay que abrir o cerrar una canilla lentamente hasta que el chorro de agua sea regular.
Luego cargamos el peine electrostaticamente frotandolo con las medias.
Acercamos con cuidado el peine al chorro de agua. Pero, sin llegar a tocarlo se observa cómo se desvía.
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